Llevar una vida sana es el actual anhelo de muchas personas, y la alimentación es un hábito más que importante para lograrlo.
Hoy en día vivimos en una sociedad donde el estándar de belleza ha llevado a muchas personas a seguir muchísimos métodos poco adecuados para perder peso, sin pensar en las consecuencias que ello acarrea sobre el cuerpo humano.
Existen muchos medicamentos que ayudan a personas a bajar de peso, pero no son la mejor opción cuando se desea bajar unos kilos. Los fármacos tienen un gran efecto y suelen ser cruciales en personas que son muy obesas, aunque siempre los médicos deben respetar una serie de parámetros antes de recetar las pastillas en cuestión.
Uno de los mayores problemas con los medicamentos para adelgazar es que existen muchos de venta libre (podemos ver las publicidades en televisión a diario), y nadie piensa en los peligros que pueden provocar sobre el cuerpo de quienes los toman.
El efecto de una pastilla para bajar de peso depende del metabolismo de cada persona, y por ello no cualquiera puede tomarlas.
Y los fármacos de venta libre por lo general no logran los resultados deseados en los consumidores, y eso lleva a que se aumente la dosis a un número mayor de píldoras por día. Esto es algo desastroso, porque puede producir fallas hepáticas o desgarros en las paredes del estómago.
La mejor opción para adelgazar sigue siendo la dieta. No es fácil ni milagrosa, pero pueden tener la seguridad de que será mucho más saludable que cualquier pastilla que se venda en el mercado. Si tienen dudas al respecto, consulten a su médico o nutricionista de confianza.
Fuente blogmedicina.com
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