La actividad física debe ser un hábito diario: Ejercitarse alegra, vigoriza y anima

Las labores cotidianas relativas al hogar y al trabajo mantienen a las personas activas, pero a la vez generan un estrés rutinario, el cual se acumula por diversos motivos, tales como la congestión vehicular y demás inconvenientes que no permiten un cumplimiento claro de la planificación. Por lo general se intenta alcanzar un desahogo mental, a veces sin tomar en consideración que la parte física también necesita descargar las tensiones. La mejor forma de drenar ambas condiciones y repotenciarlas es entrenar en un gimnasio.

La ansiedad y la depresión son patologías que están presentes en cada momento y frecuentemente se llevan de la mano. Entre las mejores formas para erradicarlas está una rutina de ejercicios. Así lo analiza la Doctora Mónica Mosquera, especialista en Psiquiatría Psicoterapeuta: “Cuando una persona se acondiciona físicamente, adquiere un componente protector saludable, como lo son las endorfinas, las cuales aumentan el estado de ánimo, mejorando el estilo de vida tanto física como mentalmente. Incluso, se ha descubierto que el ejercicio tiene infinidades de ventajas terapéuticas. Los propios especialistas ya recomiendan a sus pacientes realizar actividades deportivas o ir al gimnasio y volverlo un hábito”, afirma la galeno.

La depresión puede llegar al punto de agravarse y en ese caso debe ser llevada con otras instrucciones terapéuticas. “Al paciente que sufre esta patología no se le puede recomendar ir al gimnasio de inmediato, pues no podrá hacer los ejercicios porque mentalmente no es capaz. Primero debe tener un tratamiento terapéutico-médico, esto debido a una alteración de los neurotransmisores. Es allí cuando deben ser suministrados medicamentos bajo estricta prescripción del facultativo, a fin de que el paciente recupere su estabilidad motora. Una vez superada esta fase con tratamiento, se le aconseja realizar alguna actividad física, para que la mente se oxigene y comience su recuperación mental, que podría ser más rápida con ejercicio”, asegura la especialista.

A medida que el ejercicio físico aumenta y se hace rutinariamente, incluso se revierten síntomas y emociones negativas asociadas a la edad, como lo señala la señora Aida León, de 74 años, usuaria fiel de Gold’s Gym. “El hacer ejercicio ha hecho que me sienta joven. Es más, mi doctor me dice que no deje de ir al centro fitness, porque esto ha logrado que tenga unos huesos fuertes y me sienta saludable. Es como un vicio para mí, tanto que si no voy un día me siento mal. Ir al gimnasio me ha ayudado a superar situaciones difíciles, así me distraigo y me desconecto de todo lo que ocurre. Por eso, lo mejor es ejercitarse”, afirma.

Por ello, invitamos a todas las personas que quieran comenzar una vida saludable y vigorosa, a salir del estrés diario, hacer ejercicio y digan: ¡Abajo la depresión!

Via informe21.com